Nuestro cerebro es un órgano al que a menudo hacemos trabajar en exceso.

Sus funciones están sobrecargadas, y no es extraño que aparezcan síntomas que nos hablan de esta sobrecarga, sobre todo en forma de “no puedo dejar de pensar en…” “mi cabeza no para”

 

Nuestra respiración, nos muestra la forma en la que estamos en contacto con el mundo. A menudo retenida, a menudo demasiado agitada... a veces experimentamos que nos falta el aire...

 

Y nuestros músculos también hablan y nos reflejan esta realidad, en forma de tensiones acumuladas, contracturas, dolores musculares, rigideces…

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Atender a nuestro cuerpo, también es atender a todo nuestro ser. Y en medio de tanto ruido y velocidad, incorporar formas de parar, soltar y relajar, pueden proporcionarnos  la posibilidad de recuperar la serenidad perdida

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En este taller de 4 horas de duración, podrás aprender técnicas basadas en la Meditación, la relajación muscular, y el control respiratorio, que te pueden ser de gran utilidad para cuidarte, y cuidar esa serenidad tan deseada.

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